¡Hola chicos!
Hoy quiero hablaros del Principio de cooperación en relación con una mención hecha por la profesora Carla en una sesión sobre el tema 2. Es un tema que ya he tratado antes, durante un examen de lingüística española, y ya a esa hora me había complacido tanto que recuerdo haber hecho algunas investigaciones un poco más profundas.
Según la definición del instituto Cervantes el principio de cooperación es:
comunicarse. Puede definirse, por tanto, como un principio general que guía a los interlocutores en la conversación.”
El filósofo americano H. P. Grice que elaboró dicho principio lo define de la siguiente manera:
“Haga que su contribución a la conversación sea, en cada momento, la requerida por el propósito o la dirección del intercambio comunicativo en el que usted está involucrado”.
Una de las tendencias de la pragmática es la que estudia la relación entre lo dicho y lo comunicado por implicación. Hay dos teorías en competencia: la teoría de Grice y la teoría de la relevancia. Grice afirma que entre los hablantes hay un acuerdo previo, tácito, de colaboración entre los hablantes, que sean desconocidos o no. Amigos o enemigos, el hablante intentará siempre llevar a cabo el objetivo de la comunicación, a través del principio de cooperación, intentando entender lo que el otro quiere comunicar. "Debemos" comportarnos así porque es lo que los demás esperan de nosotros, y nosotros de los demás. Tan fuerte es esta expectativa, que, si el hablante parece no cumplir con este principio, el oyente (nuestro interlocutor) pensará que el hablante quiere decir otra cosa.
El objetivo de la investigación de Grice es demostrar que el supuesto según el cual las diferencias de significado existen es un error que deriva de “haber prestado poca atención a la naturaleza y a la importancia de las condiciones que gobiernan la conversación” para decirlo con sus palabras. De aquí acuña el término implicatura aportando un ejemplo: Supongamos que A y B están hablando acerca de un amigo común C que está ahora trabajando en un banco. A le pregunta a B cómo le va a C en su empleo y B responde: «¡Muy bien! Se siente a gusto con sus compañeros y, además, no le han metido todavía en la cárcel.» Justo en este momento; A podría preguntar qué era lo que B le estaba dando a entender (implying), lo que le estaba sugiriendo o lo que le quería decir (meant) al afirmar que a C no le habían metido todavía en la cárcel. La respuesta podría ser, por ejemplo, que C es el tipo de persona proclive a sucumbir a las tentaciones derivadas del empleo que tiene; o que los compañeros de C son en realidad, gente muy desagradable y traicionera. Según Grice lo que B quiere decir, implica, mediante sus palabras es diferente de lo que dice en realidad es decir que, por medio del significado convencional, literal, de las palabras B dice simplemente que C todavía no se ha ido a la cárcel. Lo que en vez quiere decir puede ser que C es el tipo de persona a quien tienta demasiado el dinero; este significado adicional es una implicatura de lo dicho.
Sucesivamente Grice identifica dos tipos de implicaturas:
Conversacionales: no dependen del significado convencional de las palabras emitidas. Se originan en que el hablante diga lo que dice en determinado contexto compartido por los interlocutores, y el presupuesto de que está observando el principio de cooperación.
Convencionales: forman parte del contenido de ciertas expresiones lingüísticas y se pueden definir como significados adicionales implícitos que vienen incorporados en el contenido de las expresiones. A diferencia de las otras no requieren ningún contexto específico.
Comunicar sin decir, y contar con que el oyente va a inferir lo implicado es posible solo cuando los hablantes respectan ciertas categorías que Grice llama máximas, que a su vez contienen submáximas:
Cantidad: tiene que ver con la cantidad de información a proporcionar. Esta no tiene que ser ni inferior ni mayor y que esto llevaría a la confusión el oyente e incluso podría conducir a un malentendido.
Calidad: nuestra contribución tiene que ser verdadera. Además, no tenemos que decir lo que creemos sea falso y lo que tiene carencia de pruebas.
Relación: Grice define esta categoría con una frase “Vaya usted al grano” es decir que hay que decir cosas relevantes, pertinentes.
Modo: se refiere a como decimos las cosas. Hay que evitar ser oscuro al expresarse, evitar ser ambiguo, evitar ser prolijo y proceder con orden.
Si los hablantes no cumpliesen con estos supuestos probablemente no habría implicaturas, y quizá no habría conversación.
Os dejo aquí un vídeo divertido que os hará reflexionar sobre este tema.
¿Y vosotros colaboráis cuando comunicáis?
Referencias
- Principio de cooperación. Centro Virtual Cervantes. Recuperado de https://cvc.cervantes.es/ensenanza/biblioteca_ele/diccio_ele/diccionario/principiocooperacion.htm
- Luis Valdés Villanueva. (1991). Lógica y conversación (Grice, 1975). La búsqueda del significado. Lecturas de filosofía del lenguaje. Madrid: Tecnos.
¡Hola Federica! Me ha parecido una publicación muy interesante y no he podido evitar comentar en ella. Al igual que tú, yo también traté este tema en mi grado de Lenguas Extranjeras, era pregunta de examen. Por lo tanto, es algo que quieras que no, todavía recuerdo ya que nuestra profesora insistía demasiado en su definición y en lo importante que era para que existiera una conversación o interacción entre una o más personas.
ResponderEliminarCuando mencionas las máximas de Grice, no puedo hacer otra cosa que no sea preguntarme si esto podría tener alguna relación en el campo de la docencia. Me imagino que sí, puesto que algunos docentes transgreden estas máximas. Por ejemplo, cuando un docente empieza a explicar el Past Simple y empieza a contar una historia de lo que hizo ayer y acto seguido se desvía de la conversación y del tema que estaba explicando, digamos que podría estar transgrediendo la máxima de Relación de Grice, ¿no? Puesto que no está yendo al grano. O quizás si abruma a sus estudiantes con una sobreabundancia de información sobre el Past Simple, quizás los y las estudiantes dejen de prestarle atención, por lo tanto el docente habrá transgredido la máxima de Cantidad. No sé, igual son solo conjeturas.
Aún así, me parece muy interesante el mundo de las implicaturas y de la pragmática. Diciendo poco podemos significar mucho.